Treinta y ocho años después de la invasión del Sahara Occidental por Marruecos, la identidad de los promotores del conflicto y aquellos que echan leña al fuego en el Sahara ya no es un misterio. La cuestión de los derechos humanos y del mandato de la MINURSO puso de manifiesto la complicidad de Francia y su voluntad de mantener este conflicto cueste lo que cueste.
Gracias a Francia, Marruecos puede seguir torturando, humillando, insultando y encarcelando en el Sáhara Occidental. Ni un día pasa sin que decenas de saharauis sean hospitalizados por las heridas causadas por las porras de la policía marroquí.
Gracias a Francia, Marruecos sigue bloqueando los esfuerzos de la ONU para acabar con este conflicto.
En la posición de Francia, hay una cuestión de intereses, pero también de afinidades. La prueba está en esta foto de dos soldados franceses « asando » a un pobre africano.
Viendo esta foto, uno se acuerda enseguida del refrán que dice “dime con quién andas, te diré quién eres”. Los franceses y los marroquíes son aliados. Comparten la crueldad y la inclinación por la injusticia.
La MINURSO (Misión de la ONU en el Sáhara Occidental) es la única misión de la ONU que carece de un componente encargado de informar sobre la situación de los derechos humanos en la antigua colonia española. El veto de Francia en el Consejo de Seguridad impide a éste resolver esta anomalía. Si usted cree que la MINURSO debe vigilar los derechos humanos, haga clic aquí y firme la petición en francés dirigida al secretario general Ban Ki-moon y cuelgue esta petición en su página. Muchas gracias
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