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En una entrevista publicada hoy en La Voz de Galicia y realizada por Rubén J. García, el catedrático Carlos Ruiz Miguel vuelve a poner el foco en una realidad jurídica que España y parte de la comunidad internacional prefieren ignorar: el Sáhara Occidental sigue siendo un territorio pendiente de descolonización, y España –por mucho que intente eludirlo– continúa siendo la potencia administradora de iure. Así lo afirma Naciones Unidas desde 1975, sin ambigüedades. No hay transferencia de soberanía a Marruecos, no hay legalidad que legitime su presencia. Cuando el Gobierno español decide reconocer el plan de autonomía marroquí, no está resolviendo el conflicto: está violando el derecho internacional.
El profesor lo dice con claridad: «Naciones Unidas no ha aprobado el plan marroquí, ni lo ha respaldado como solución». La resolución 2797 (2025), aprobada la semana pasada por el Consejo de Seguridad, no valida el esquema marroquí, ni elimina el derecho del pueblo saharaui a decidir sobre su futuro. La ruptura del alto el fuego en 2020 y la reanudación de la lucha por parte del Frente Polisario son consecuencia directa del bloqueo internacional, pero también de una verdad que está en el aire desde hace décadas: el referéndum de autodeterminación no se ha celebrado porque Marruecos lo ha impedido, con la complicidad silenciosa de sus aliados.
Más grave aún es el componente de chantaje diplomático que podría subyacer al giro español. Ruiz Miguel apunta que el cambio de posición en 2022 no se explica por razones jurídicas ni políticas internas, sino por presión externa ligada al espionaje con el sistema Pegasus. Pedro Sánchez, que un año antes había posado públicamente con el presidente saharaui, pasó súbitamente a avalar la propuesta marroquí sin consulta al Parlamento ni al pueblo español. Un movimiento opaco, sin legitimidad democrática, que deja al descubierto la fragilidad de la soberanía política cuando la política exterior se somete al chantaje.
Y mientras tanto, el tiempo corre, pero la verdad no cambia: el pueblo saharaui sigue siendo un pueblo con derecho a la autodeterminación, reconocido en todas las instancias internacionales. España, guste o no a quienes gobiernan hoy, sigue siendo responsable ante el derecho internacional: de proteger a la población saharaui, de impulsar la descolonización y de no colaborar en la prolongación de la ocupación. La historia juzgará no solo a quienes ocupan, sino también a quienes callan, legitiman o miran hacia otro lado. Es hora de elegir: ¿del lado del derecho o del lado de la impunidad?
Hé aqui el artìculo en su integridad:
Carlos Ruiz Miguel, catedrático de Derecho Constitucional en la USC: «España está incumpliendo el derecho internacional en el Sáhara Occidental»
Rubén J. García
Señala que el conflicto «está igual» que hace cincuenta años y apunta al espionaje de Pegasus como el motivo «más probable» del cambio de postura del gobierno español respecto a la soberanía de este territorio
08 nov 2025
La Voz de Galicia • Viernes, 7 de noviembre de 2025 • INTERNACIONAL • 19
El giro del PSOE sobre el Sáhara deja solos a los defensores de la independencia
Los socios del Gobierno plantan a Sánchez y registran mociones para volver a la postura tradicional del Estado que apoyan PP y Vox
PABLO MEDINA
MADRID/LA VOZ
Son mayoría, pero a la vez están solos. Los socios minoritarios del Congreso escucharon hace tres semanas del ministro de Exteriores asumir que Marruecos ha ido ganando apoyos en la Eurocámara dentro de su territorio y que, en algún momento, la libre determinación para la excolonia española “podría no ser la única realidad y creíbles decisión”. Hoy, a la vuelta de la esquina de Noche Vieja, los socialistas siguen dejando solos a sus socios minoritarios, con nadie más. Ni siquiera con sus socios del Gobierno.
Al PSOE no le ha funcionado la maniobra de presionar a la ONU de que el PP y Vox, socios del PSOE, dejen de ser los únicos que, en el Congreso de los Diputados, apoyan la independencia del Sáhara. El problema del PSOE es que, a la vuelta de la esquina, a la espera de la resolución de la ONU, la minoría del Congreso no tiene nada que perder con la resolución de la ONU. La maniobra de presionar a la ONU fue, para Pedro Sánchez, solo una táctica para ganar tiempo.
Los socialistas ya han registrado una iniciativa legislativa para proponer al Congreso que apruebe un cambio de postura para apoyar la posición de Marruecos, aunque sin abandonar la defensa de la libertad de expresión.
Los socialistas han pedido a sus socios que reviertan su posición y que retiren sus iniciativas registradas para volver a la posición tradicional del Estado español de apoyar la libre determinación del Sáhara. Entre los socios del Gobierno que han registrado iniciativas contra la posición del PSOE están Unidas Podemos, ERC, PNV, Bildu y JxCat.
Boicotear acuerdos
Los socios del Gobierno y la oposición (PP y Vox), que han rechazado la posición del PSOE, quieren boicotear la resolución de la ONU que apoya el plan marroquí.
qui. Sin embargo, los populares llevan desde el 2022 denunciando que Sánchez ha tomado decisiones sobre cuestiones de Exteriores y Defensa sin la aprobación del Consejo de Estado ni del ejecutivo del Sáhara, y que se ha limitado a negociar y ponerse de acuerdo con el Gobierno de la Unión Europea que incluye productos saharianos. Ahora, el PP y Vox han vuelto a presentar la iniciativa que presentaron en su día a las Cortes.
Contrastes. Mientras en ciudades como El Aaiún los marroquíes han salido a celebrar el 50 aniversario de la Marcha Verde, los saharauis continúan con las movilizaciones masivas en contra de la resolución de la ONU que, en base de la propuesta socialista, podría dar como resultado, una solución que…
CARLOS RUIZ MIGUEL, CATEDRÁTICO Y PROFESOR DE DERECHO CONSTITUCIONAL EN LA USC

«España incumple sus obligaciones en el Sáhara»
RUBÉN J. GARCÍA
REDACCIÓN/LA VOZ
«Un día como hoy de 1975, Marruecos invade el Sáhara Occidental y invade el Sáhara Occidental. Yo estaba en el Servicio de la Cruz Roja, capitán del territorio de la República. El profesor Ruiz Miguel, catedrático y profesor de Derecho Constitucional de la USC, ha dedicado gran parte de su carrera al análisis de este conflicto y denuncia que, con la postura actual, el Gobierno español está incumpliendo el Derecho Internacional. La ONU es un organismo que tiene una responsabilidad muy clara. Y es que, si se tienen en cuenta las resoluciones de la ONU, la situación actual es insostenible».
—¿Cómo describiría la situación actual en el Sáhara Occidental?
—El Consejo de Seguridad de la ONU defiende el derecho a la libre determinación en el territorio. Hay más de 50 resoluciones en 50 años. Esta última resolución no ha traído la paz al territorio. El Sáhara Occidental está reconocido como un territorio no autónomo que está pendiente de la descolonización. Desde 1990, Marruecos no ha conseguido que la solución de la ONU sea internacional ni soberana sobre el territorio, como lo había habido algunos países. Pero hay un problema, y es que lo han reconocido, pero en este momento las Naciones Unidas son incompatibles con las obligaciones legales de estos Estados. Esta última resolución de la ONU no ha aprobado el plan marroquí ni el español. El otro, por otro lado, el pueblo saharaui y el Frente Polisario. Tampoco ha conseguido que esta última resolución aplique el plan aprobado para garantizar una solución viable y sin ambigüedades que se ha aprobado para el 2026, lo cual tendría que ser en el año 78.
—¿Aclarado eso, volvamos cinco años, se ha levantado el alto al fuego entre ellos?
—Así es, aunque la guerra que se desencadenó fue en el año 75, justo después de 1975-1990. Es decir, que Marruecos invadió y ocupó precisamente por esa invasión. Y que los saharauis no aceptaron el plan de arreglos. No aceptaron el plan de paz. España había llegado a una situación de guerra, pero el Frente Polisario no ha levantado el alto el fuego con Marruecos. El Frente Polisario ha levantado el alto al fuego con Marruecos, pero seguía teniendo obligaciones con el Plan Territorial. Ahora la relación de fuerzas en el Sáhara Occidental es la que es en el año 90.
—¿Quién gestiona el Sáhara territorialmente, España sigue teniendo alguna responsabilidad?
—Desde el punto de vista del Derecho Internacional, sí. España es potencia administradora, pero en la práctica esto no es posible por la descolonización, porque España, a pesar de no tener presencia en el espacio aéreo del Sáhara, reconoce el espacio aéreo del Sáhara Occidental, según reconoce la Organización de la Aviación Internacional. Hay unas obligaciones muy claras. El Sáhara es el gran fallo, pero está siendo infringido por España y sus socios. Ya no se apoya como mejor solución la celebración de un referéndum donde la soberanía marroquí sin su consentimiento, es la descolonización, con potestad para su autoridad, si se acepta. Y Marruecos, de esta decisión. Eso implica un incumplimiento de la responsabilidad, pero, como vemos en otros casos, la presión a través de los derechos y no tienen ninguna obligación con ellos.
—¿Por qué España cambió su posición sobre el Sáhara en el 2022? ¿Guarda relación con el espionaje a Pedro Sánchez?
—La explicación nunca se ha dado en términos muy claros como podemos especular. A mi entender, lo más probable es que fuera como consecuencia del espionaje de Pegasus y un chantaje por lo que se ha dado, que hay un hecho muy significativo: Pedro Sánchez fue espiado y lo hizo público en 2023 con el presidente de la República de El Salvador. Eso era un mensaje, porque no puede espiar al presidente. Pero después se produjo el cambio de la posición de Marruecos, que fue el sendero de la Resolución de Marruecos en junio de ese mismo año. España se había abstenido diplomáticamente, pero la destitución del ministro de Exteriores y la llegada de José Manuel Albares al Ministerio de Exteriores cambió totalmente la posición de España. Y no hay una explicación. A mi juicio, ese cambio de posición implica presión, y tampoco el Gobierno español ha dado la cara para aclarar lo que sucedió.
—¿Tiene que ver en este conflicto, como el de Palestina, ¿hay una gran potencia que lo que sucede en el Sáhara?
—El conflicto es un pueblo saharaui es más pequeño que el palestino, pero es un pueblo. De todas. Desde el año 1975, los Gobiernos españoles que han apoyado a Marruecos han tenido una posición ambigua en el conflicto del Sáhara Occidental. Me atrevería a decir que es un de que, cuanto mejor se comporte el Gobierno español, mejor resulta que el Gobierno español incumple con sus propios compromisos y obligaciones internacionales.
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